Maduro pierde la contienda

Maduro pierde la contienda
Por
Manuel Díaz

agosto 05, 2024 a las 04:00 GMT-6

El cambio político en Venezuela tendrá un notable impacto en toda Latinoamérica, particularmente en los movimientos populistas y autoritarios que se han extendido dentro y fuera del continente.

Maduro pierde sustento

El giro se ha evidenciado con las derrotas que ha enfrentado Nicolás Maduro. La primera fue el domingo 28 de julio, en las elecciones donde, a diferencia de las anteriores, la oposición y los ciudadanos se movilizaron y, a través de los votos, confirmaron la victoria de Edmundo González, algo que el gobierno venezolano aún se niega a aceptar.

Por otro lado, Maduro también ha visto erosionado el apoyo que antes tenía de líderes populistas y autoritarios en la región. Actualmente, la mayoría de los países reconocen la victoria de González. Entre ellos se encuentran Perú, Uruguay, Argentina, Chile, Panamá, Guatemala, El Salvador, Ecuador y Costa Rica. Además, países como Estados Unidos, la Unión Europea, España, Alemania, Portugal y Reino Unido, que inicialmente solicitaron un recuento de votos, ya reconocen el triunfo de González.

Brasil y Colombia pidieron el recuento de votos y aún no han expresado su apoyo a González, pero tampoco han demostrado respaldo a Maduro.

Otro golpe reciente para Maduro fue la gran protesta en las calles de Caracas que se replicó en las principales ciudades del país, donde los ciudadanos defendieron sus votos de manera pacífica. Corina Machado, quien había estado evitando su arresto, lideró estas protestas. A pesar de intentos de detenerla, la población impidió este acto: “Después de una brutal represión, creyeron que nos iban a callar, atemorizar o paralizar, pero la presencia de todos ustedes aquí demuestra al mundo la magnitud de nuestra fuerza y nuestra determinación para seguir hasta el final.”

Descontento en instituciones

El rechazo se profundizó cuando Enrique Márquez, exmiembro de la Asamblea Nacional y vicepresidente del CNE, se negó a firmar una citación impulsada por Maduro. Márquez afirmó que dicha citación carecía de transparencia y aclaró que las instituciones deben operar dentro del marco constitucional para salvaguardar la paz en Venezuela.

Dominio autocrático

Maduro asumió la presidencia en 2013 tras unas elecciones muy cuestionadas. En su primer mandato, continuó el desmantelamiento institucional iniciado por Hugo Chávez, restringiendo las libertades ciudadanas y de la oposición, lo que le permitió asegurar su reelección en 2018.

Para consolidar su poder, desestimó las decisiones de la Asamblea Nacional y creó una Asamblea Constituyente paralela para aprobar leyes favorables a su gobierno, destruyendo así las instituciones democráticas y estableciendo mecanismos de represión y control total.

La intervención en el poder judicial fue similar. Logró un férreo control sobre el sistema judicial, lo que permitió la inhabilitación de políticos opositores cuando en 2017 la Asamblea Nacional Constituyente designó nuevos magistrados pro-Maduro, manteniendo el poder judicial bajo su dominio absoluto.

Quizás también te interese:  Motivos para la suspensión del programa humanitario de parole en EE.UU

Al perder la narrativa, Maduro recurrió a pretextos inverosímiles como acusar a Elon Musk de hackear el sistema electoral, algo absurdo dado que el proceso de conteo es automatizado y ya ha sido demostrado por la oposición.

El grave problema es que, una semana después de las elecciones, el CNE aún no ha publicado las actas de votación de cada mesa.

Maduro se encuentra sin argumentos válidos ni respaldo, y enfrenta la posibilidad de ser arrestado bajo una orden emitida por Estados Unidos en 2021 por narcoterrorismo, corrupción y tráfico de drogas.

Salida inevitable

Todo apunta a que Maduro deberá abandonar el poder. Si decide hacerlo de manera pacífica, podría pactar su salida y buscar refugio en países como Cuba, Nicaragua, China o Corea del Norte. Sin embargo, si opta por resistirse, podría enfrentar un destino similar al del exdictador hondureño Juan Orlando Hernández.

Esta situación tendrá repercusiones en México y en toda Latinoamérica, donde los vientos ya soplan a favor de la democracia. ¿Aprenderemos en México a defender nuestras instituciones, o esperaremos a que la única solución sea una intervención extranjera y el completo fracaso del gobierno actual?

Quizás también te interese:  Federico Arreola responde preguntas sobre el seguimiento de Claudia Sheinbaum y presenta novedades

X: @diaz_manuel

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos y para mostrarte publicidad relacionada con sus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad